LA VIDA MISMA Y LA POLITICA CON TODOS SUS MATICES
Por: ARTURO SOTOMAYOR SALAS
En el frontis de la casa donde vivo hay un
árbol donde un pajarillo había hecho un nido. Observé cuidadosamente durante
varios días como empezaba una nueva vida. Me sentía partícipe de la creación del
mundo, al contemplar con alegría y alborozado el crecimiento de un pájaro muy
bonito. Realmente llenaba la existencia y la vida en estos días de diciembre,
mucho más de lo que uno puede imaginarse.
Por alguna circunstancia que a veces escapa de
tus manos, ayer vi muy impresionado, como el pajarito volaba quizá en uno de
sus primeros intentos hasta detenerse en medio de la pista. Fue un instante.
Advertí también de la presencia de un vehículo enorme desplazándose al parecer
con cierta cautela. Quise hacer algo y no atiné a nada. Creo que murmuré
mirando al conductor y haciendo alguna seña, algo así como: – ¡Cuidado con el
pajarito!, observando en el acto como el pesado camión pasaba con sus llantas
posteriores sobre la naciente vida.
Fue pavoroso y brutal. Me sentí enmudecido
por no haber alcanzado a reaccionar con prontitud. Sinceramente creo que esa
imagen albergará en mi alma por mucho tiempo.
LA POLITICA CON TODOS
SUS MATICES
A pesar de todo ello, podemos controlar
muchas acciones. Sin embargo, nos hemos visto envueltos en increíbles
decisiones que han tomado los candidatos para integrarse en determinadas planchas
presidenciales. Nuestra región no es ajena a esas determinaciones.
Lo primero que podemos destacar es la
figuración personal. El objetivo es figurar. Aparecer públicamente sin importar
nuestra esencia y conciencia social que asumimos y representamos. Es por ello que ahora, podemos ver a
candidatos que antes se forjaron en grupos progresistas y de izquierda, que se
alinean muy fácilmente en organizaciones que antes jamás hubieran pertenecido.
Lo mismo sucede con otros u otras, que sintiéndose los llamados a salvar a esta
denominada democracia en que vivimos, pasan de una organización a otra sin
ningún miramiento o vergüenza política.
Dentro de las planchas presidenciales, algunas
han causado ciertos comentarios. Una de ellas es la conformada por el Partido
Aprista con García y el Partido Popular Cristiano con Flores. Sus intentos de
tratar de explicar la intencionalidad coyuntural que han tenido no convencen.
No tienen un programa económico definido para los próximos quinquenios.
Mencionan simplemente sobre la economía social o la economía de mercado como la
panacea que resolverá los problemas de crecimiento, sin comprender que tenemos
un nuevo modelo de economía dinámica de mercado. No le augurio buenas
expectativas. Aunque pueden pasar la valla electoral que están buscando
finalmente como otros, como tener cierta representación congresal.
La inclusión de Aráoz, una excandidata a la
presidencia por el Partido Aprista en el grupo de Peruanos por el Kambio de
Kuczynski nos muestra hasta donde se ha llegado con la política. Ya no hay
esencia de principios ni menos un programa de gobierno. Aquí la propuesta y
ofrecimiento de obras es solo coyuntural, del momento.
Ni qué hablar de aquellos que dicen ser
nacionalistas. La participación de Villarán en la plancha que finalmente es de
Urresti, refleja que la política se toma como una broma. Juntos no representan
nada programático. Pagarán su “derecho de piso” como muchos.
Observar como la participación de Huároc en
la plancha de Fujimori, es lo último que se puede esperar cuando se abandona
los principios primigenios en que uno asume una posición social en defensa de
las grandes mayorías. Esto es increíble.
Finalmente, la plancha de Acuña también nos
trae sorpresas. Anel, quien es candidata a la primera vicepresidencia ha sido
muy afortunada, porque ha llegado tres veces al congreso candidateando con tres
organizaciones diferentes. Definitivamente no hay principios ideológicos, quizá
simplemente cierto arribismo político y un poco de suerte.
Con todo esto y las diversas planchas
presidenciales, creo que nos encontramos en una encrucijada política que no
será fácil de resolver a corto plazo. Esperamos estar inspirados.