Me impresiona cuando el Banco Central de Reserva hace sus estimaciones de crecimiento. Sabemos que a inicios de este año 2014, ellos estimaban tasas de crecimiento del producto bruto interno por incima incluso del 6%. Claro y como parece natural, posteriormente sus estimaciones fueron descendiendo. Así, dieron cifras cercanas al 4%, para luego de algunos meses volver a plantear tasas por debajo.
Ahora que estamos empezando noviembre, sus estimaciones bordean el 3%. La realidad les va mostrando una variabilidad para fin de año entre 2.5% a 2.9%.
Alguien preguntó si realmente todos crecemos. El contexto social nos muestra que algunos pueden crecer mucho más, mientras que otros simplemente van descendiendo en sus perspectivas y otros no llegan a mejorar sus niveles de vida y satisfacción.
Sin embargo, las circusntancias nos obliga personalmente a replantear nuestra orientación de crecimiento. Hay que hacerlo. Just do it.
La fotografía es del pueblo de Pampamarca en el Cuzco. Para llegar al pueblo hay que subir una montaña desde Combapata. A pocos de minutos de Tinta, San Pedro y San Pablo. Los niños ayudan a sus padres a trabajar. Ese es nuestro crecimiento. Ese es.
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